Samir Flores, un conocido activista de 35 años, opositor a la construcción de una termoeléctrica en el Estado de Morelos, fue asesinado la madrugada de este miércoles, cuando salía de su casa en el pueblo de Amilcingo.
Los hechos ocurrieron la madrugada de este miércoles, cuando dos automóviles pararon frente al domicilio de Flores y lo llamaron para que saliera, según informan activistas de la zona. Tras escuchar cuatro balazos, los vecinos encontraron al activista tirado en el suelo con dos disparos en la cabeza. Lo trasladaron al hospital, pero murió antes de llegar. El asesinato, ha ocurrido en medio de una tensión creciente en el estado de Morelos, que se prepara para una consulta popular, para decidir sobre la viabilidad del proyecto en el estado, en tres días.
La construcción inició en 2012, y ha sido rechazada por académicos y habitantes de la zona por su posible impacto medioambiental. El mandatario, que ha pasado de oponerse a la central a apoyarla, no ha dado marcha atrás a la consulta pese al asesinato. “Tenemos que continuar; no podríamos detenerla”, aseguró López Obrador.
Medios locales informaron que junto al cadáver del activista los asesinos habían dejado un mensaje que lo vinculaba al “Comando Tlahuica”, un grupo de la delincuencia organizada que opera en Morelos. “X Puto Chismoso. Denunciaste Abraham Ocampo y sigues tu Michoacano con tu pendeja banda. Atte. Comando Tlahuilca”, decía la nota.
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