Ciudad Juárez, Chihuahua.- La propietaria de la Funeraria Del Carmen, Nancy Ivette A. A., enfrenta ahora su cuarta causa penal por delitos graves contra el manejo de cadáveres y fraude, al ser imputada por ocultar el cuerpo de un hombre en febrero de este año y simular su cremación a cambio de 40 mil pesos. La notificación se realizó en el interior del penal donde ya cumple prisión preventiva por casos similares, en medio de un escándalo funerario que ha sacudido a la frontera desde el verano pasado.
El Ministerio Público de la Fiscalía de Distrito Zona Norte detalló que los hechos ocurrieron a partir del 16 de febrero de 2025, cuando la imputada presuntamente recibió el cadáver de un masculino desconocido y, en lugar de procesarlo adecuadamente, lo escondió para luego entregar cenizas falsas a los familiares. Esta maniobra no solo vulneró las normas de inhumación y exhumación, sino que generó un lucro indebido que ha profundizado la desconfianza en el sector funerario juarense.
Elementos de la Agencia Estatal de Investigación acudieron ayer lunes al Cereso Femenil No. 2 de Ciudad Juárez para cumplir con la orden de aprehensión y formular la imputación formal. Nancy Ivette A. A., quien ya se encuentra recluida por medidas cautelares en al menos tres procesos previos, fue informada de los cargos: violaciones a la correcta inhumación, exhumación y respeto a cadáveres o restos humanos, además de fraude. Hasta la fecha, el paradero del cuerpo sigue siendo un misterio, lo que agrava la investigación y el dolor de los deudos.
El Juez de Control del Distrito Judicial Bravos programó la audiencia de vinculación a proceso para este viernes 31 de octubre, a las 11:00 horas. En esa instancia se definirá si la imputada avanza a juicio por este nuevo expediente, sumándose a la cadena de denuncias que la mantienen tras las rejas.
Raíces en el escándalo del Crematorio Plenitud
Este caso no surge en el vacío, sino como eco de un fraude masivo destapado en junio de 2025 en el Crematorio Plenitud, donde autoridades hallaron 383 cuerpos embalsamados e irregularmente almacenados, muchos de ellos entregados como «cenizas» falsas compuestas de tierra y piedras a cientos de familias. La Funeraria Del Carmen fue señalada como una de las seis empresas que contrataron servicios del sitio clandestino, lo que desencadenó una ola de investigaciones. Entre los afectados, se identificaron restos de cuatro menores, avivando la indignación pública y demandas de justicia más amplia.
La primera imputación contra Nancy Ivette A. A. se registró en septiembre de 2025, por manipulación de restos y fraude en un incidente similar de ocultamiento de cadáver y cremación simulada, donde se le vinculó como la tercera implicada en hechos del 12 de julio. Apenas tres semanas atrás, el 21 de octubre, fue detenida nuevamente en el centro de la ciudad por un segundo proceso relacionado con el hallazgo de cuatro cuerpos no cremados en sus instalaciones y una bodega cercana, lo que derivó en prisión preventiva por hasta 12 meses. La tercera carpeta, resuelta el 22 de octubre, la dejó en custodia por exhumación indebida y respeto a cadáveres, confirmando un patrón de irregularidades que ha involucrado también a empleados como Roberto Isaac A. A.
Familiares de víctimas del Crematorio Plenitud han exigido que se amplíe la red de detenciones, argumentando que el fraude trasciende a una sola funeraria y afecta a todo un gremio que asumió «responsabilidad moral» tras el descubrimiento inicial. Hasta ahora, se han identificado 123 de los 386 cuerpos encontrados, pero la búsqueda de justicia continúa en un contexto de opacidad y dolor colectivo.
De acuerdo con las leyes y normas vigentes, los imputados se presumen inocentes mientras no se declare su responsabilidad mediante sentencia emitida por la autoridad judicial (artículo 13 del Código Nacional de Procedimientos Penales).



