Los túneles de Juárez-El Paso
Hasta el momento se han descubierto dos, pero bien podría haber más. La memoria es flaca y se olvida que en 2008 se descubrió el primer túnel que conectaba a Juárez con la ciudad de El Paso, precisamente por debajo del río Bravo, que, siendo sólo un hilillo de agua y a veces ni eso, apenas hay una posibilidad en mil de que pueda haber un poco de humedad en los túneles. Como se recordará, el túnel Juárez/El Paso, descubierto en plena guerra de Felipe Calderón y Genaro García Luna por imponer a El Chapo Guzmán en Ciudad Juárez, tenía su entrada en los patios de la propia aduana, en el Puente de Córdoba, también conocido como Libre.
El pleito por la plaza
La guerra entre La Línea y el cártel de Sinaloa tenía por lo menos siete años de haber iniciado. Las huestes del cártel de Juárez, posteriormente rebautizado como La Línea, tenían como portero al ex policía Antonio Acosta Hernández, también conocido como Diego o el Blablazo. El Chapo Guzmán ordenó a Noel Salgueiro tomar la plaza, con poco éxito, incluso con la llegada de los refuerzos del Ejército y la Policía Judicial Federal. Incluso hoy la plaza está dividida, pero la mayor tajada la sigue teniendo La Línea.
Hipótesis sobre los túneles
En los medios policiacos y del narcotráfico, que es en buena medida lo mismo, se habla de que los dos túneles fueron construidos por el mismo grupo delictivo. El de los patios de la aduana se hizo con mínimo disimulo, mientras que el de la Plaza de la Mexicanidad se cree que aprovechó la construcción de la plaza misma para desplazar las toneladas de tierra extraídas. Siendo El Chapo un fanático de los túneles, la lógica indica que Noel Salgueiro estuvo como maestro de obra. La construcción se atribuye, aunque aún como especulación, al cártel de Sinaloa. El control posterior del túnel de la Plaza de la Mexicanidad por parte de La Línea vino de cuando el JL, probablemente José Pablo Ledezma, sobrino por parte de una hermana de Amado Carrillo Fuentes, enfrentó y amenazó al ex policía Sergio Garduño Escobedo, quien había antecedido al Blablazo al frente de la fracción del cártel de Sinaloa en Ciudad Juárez.
Un violento JL
El famoso e indiscreto JL despachaba, entraba y salía con soltura y autoridad de las oficinas de las policías municipales y estatales de Ciudad Juárez, en los tiempos de la procuradora Patricia González Rodríguez. Afianzó a La Línea en la plaza cuando, ante jefes policiacos y del narcotráfico convocados en el Parque Central (supongo que para caber), le dio un plazo perentorio para abandonar Juárez a “El Coman” Sergio Garduño Escobedo, a quien seguían llamando como cuando era policía. Garduño, según los enterados compadre de “El Mayo” Zambada, no lo pensó dos veces, sin importar lo que opinara su compadre, y, según se dice, se fue a Guadalajara, donde vive disfrazado de pastor de una iglesia cristiana.
Resumiendo sobre los túneles
Al parecer fueron construidos por el cártel de Sinaloa cuando, por orden de Joaquín Guzmán Loera, se intentaba tomar la plaza de Ciudad Juárez, la cual lamentablemente ha sido la joya de la corona para los narcotraficantes por su ubicación geográfica. Esta permite surtir a los drogadictos de la costa este de los Estados Unidos con la misma prontitud que a los de la costa oeste. Con la dominancia de JL, también referido como el «dos letras», el control de los túneles pasó a manos de La Línea, salvo el de los patios de la aduana, que fue descubierto en 2008, cuando el cártel de Sinaloa perdía la eterna guerra con La Línea. En ese contexto, llegaron los refuerzos del Ejército y de los policías de García Luna, quienes se dedicaron a saquear la ciudad, extorsionar y contribuir a que esta se anegara en sangre.
La rebelión del hotel La Playa
Duró todo el día la huelga de policías federales, fue cubierta por medios nacionales e internacionales y se transmitió en tiempo real por televisión. Los policías federales se quejaron de que su comandante, a quien se referían como “El Chamán”, los mandaba a extorsionar o bien los paralizaba en las noches y horarios en que había trasiego de droga por las calles de Ciudad Juárez. Por supuesto, no pasó nada. En octubre de 2022, el CJNG colocó mantas contra el comandante “Chamán”, ahora al frente de los cuerpos policiacos de San Luis Potosí.
¿Qué hacía Peniche Espejel?
El encargado de la Procuraduría Federal en el estado de Chihuahua era César Peniche Espejel, quien ha invertido buenos capitales en propiedades de la avenida Juárez. En aquellos momentos dedicó sus mejores esfuerzos a combatir a los vendedores de discos compactos piratas, mientras ni cuenta se daba de las balaceras que, mañana, tarde y noche, crispaban los nervios de los juarenses las 24 horas del día, los siete días de la semana. Lo más notable de su labor como encargado de la PGR fue levantar una barda de seis metros alrededor del bello edificio de la procuraduría en Ciudad Juárez, el cual ahora no puede ser admirado porque la bardota lo impide. Los CD’s, suponemos, fueron destruidos.