Los últimos 20 rehenes vivos retenidos por Hamas en Gaza fueron liberados este lunes, permitiendo reencuentros familiares cargados de emoción tras más de dos años de cautiverio. Este hito coincide con la reunión de líderes mundiales en Egipto para avanzar en el acuerdo de alto el fuego negociado por Estados Unidos, que por primera vez deja a Hamas y sus aliados sin rehenes vivos en el enclave. Paralelamente, Israel excarceló a 1,718 palestinos detenidos sin cargos y a 250 condenados por largas penas, devolviéndolos a Gaza y otros territorios. El presidente Donald Trump celebró el fin de la «pesadilla» en un discurso ante la Knesset israelí, aunque persisten dudas sobre el plan de 20 puntos que involucra a Egipto, Qatar y Turquía.
La liberación se realizó en dos grupos, generando escenas de júbilo en Israel. En la Plaza de los Rehenes de Tel Aviv, multitudes ondearon banderas y corearon agradecimientos a Trump al anunciarse la noticia. En la base militar de Re’im, al sur del país, los excautivos se reunieron con familiares cercanos. Guy Gilboa-Dalal, de 24 años y secuestrado en el festival Nova, fue abrazado por sus padres y hermanos en un video difundido por las fuerzas israelíes, donde su familia no contuvo las lágrimas. Omri Miran, de 48 años, raptado en el kibutz Nahal Oz por hombres armados de Hamas, jugó con sus hijos por primera vez en más de dos años junto a su esposa Lishay Miran-Lavi y su padre Dani. La familia de Miran emitió un comunicado destacando el inicio de un «viaje de recuperación complejo y desafiante».
Según el acuerdo mediado por Estados Unidos, Hamas debía liberar a todos los rehenes restantes, incluidos 28 fallecidos, en 72 horas tras el alto el fuego.
Las autoridades israelíes confirmaron la entrega de cuatro ataúdes a la Cruz Roja, supuestamente con restos de rehenes muertos, que fueron trasladados al Instituto Nacional de Medicina Forense en Tel Aviv para identificación. Israel aún no ha verificado las identidades, y la policía escoltó los restos bajo estrictas medidas de seguridad.
Liberación masiva de presos palestinos
Israel puso en libertad a 1,718 palestinos detenidos sin cargos durante los dos años de guerra en Gaza, transportándolos en autobuses de regreso al enclave, donde fueron recibidos por multitudes en el hospital Nasser, en el sur. Adicionalmente, excarceló a 250 personas con condenas perpetuas o largas penas. Algunos llegaron a la Ribera Occidental, como Ramala, donde se abrazaron con familiares bajo vigilancia de fuerzas de seguridad y personal médico palestino, según observaciones de reporteros en el terreno.
Otros 154 presos con sentencias por delitos violentos fueron deportados a Egipto, en cumplimiento de demandas israelíes que impedían su retorno a Gaza o la Ribera Occidental, de acuerdo con la Sociedad de Prisioneros Palestinos. Esta medida busca evitar la reincorporación de convictos a entornos de conflicto, aunque genera tensiones en las negociaciones.
Trump insta a la paz duradera en la Knesset
En un discurso de más de una hora ante el parlamento israelí, Trump declaró que «la larga y dolorosa pesadilla finalmente ha terminado» y describió el momento como un «amanecer histórico de un nuevo Medio Oriente». Dirigiéndose directamente al primer ministro Benjamin Netanyahu, le advirtió contra reiniciar la guerra, afirmando que Israel «ha ganado todo lo que podía por la fuerza de las armas» y que ahora toca consolidar la paz y prosperidad regional.
Trump enfatizó que continuar el conflicto dañaría el legado de Netanyahu, quien enfrenta acusaciones de prolongar la guerra para eludir problemas de corrupción, cargos que él rechaza. El presidente estadounidense mostró confianza en la permanencia del alto el fuego.
Aborda futuro incierto de Gaza
Trump se desplazó a Sharm el-Sheikh en Egipto para una cumbre con líderes de Qatar, Jordania, la Autoridad Palestina, Francia, Alemania y el Reino Unido, donde se firmó el acuerdo de alto el fuego. Netanyahu declinó la invitación. El plan de 20 puntos, aún con puntos pendientes, incluye la gobernanza de una Gaza devastada, el desarme de Hamas y la retirada israelí. La salida total de tropas israelíes condiciona al desarme de Hamas, dejando espacio para posibles reanudaciones de hostilidades.
El negociador de Hamas, Khalil al-Hayya, afirmó haber recibido garantías de Estados Unidos y mediadores de que la guerra termina definitivamente, no como tregua temporal. Expertos como Burcu Ozcelik, del Royal United Services Institute, cuestionan el rol futuro de Hamas en un eventual Estado palestino, señalando que Israel priorizará su seguridad y podría operar en Gaza ante amenazas. Ozcelik destaca la necesidad de gobernanza, seguridad y ayuda humanitaria, con Egipto y Turquía jugando papeles clave en la transición. Todas las partes buscan mostrar compromiso con el plan de Trump para su éxito inicial.



