¿Dónde está el dinero?
En la historia de Watergate, el escándalo que hizo renunciar a Richard Nixon a la presidencia de los Estados Unidos en 1974, el informante secreto del reportero que descubrió la trama, le recomienda:
«Sígue la pista al dinero».
Fue un consejo decisivo que llevó al éxito la investigación del periodista del Washington Post Bob Woodward.
Siguiéndole la pista al dinero se puede llegar a magníficos y a veces sorprendentes descubrimientos sobre usuarios de tarjetas de crédito, esposas, causantes del fisco, gobiernos, delincuentes, y prácticamente de casi todo mundo.
Por eso es importante saber dónde quedaron los 14 mil 980.6 millones de dólares de endeudamiento externo y 208 mil 872.5 millones de pesos de endeudamiento interno que contrató y recibió el gobierno de lópez en los primeros seis meses del año.
No es cosa de preguntarle a lópez, pues como respuesta sólo obtendríamos mentiras.
Mejor dejémoslo que nos mienta expontáneamente.
Asi, de mentiras sacamos verdades.
Mentiras fue lo que informó ayer en Culiacán, sin necesidad de preguntarle.
Dijo:
«No necesitamos créditos, tampoco es usar reservas y endeudar al país, no dejarle la carga a las nuevas generaciones, lo que queremos es que no haya endeudamiento porque más deuda significa más pago de intereses de deuda”
E introdujo lópez un elemento de chistera para intentar engañar al país:
«México tiene reservas por 192 mil 606 millones de dólares, por lo que no es requieren créditos ni contratar deuda para enfrentar la crisis…no se han caído las reservas del Banco de México, al contrario, están creciendo las reservas, entonces, son finanzas públicas sanas»
Dime de qué presumes y te diré de qué careces.
En primer lugar, nada tienen que ver las reservas del Banco de México las finanzas sanas, ni con la necesidad o no de créditos, ni con la deuda, ni es dinero captado por el gobierno.
Las reservas de Banxico no las puede tocar el gobierno ni mucho menos usarlas para el gasto. No son para eso porque no son suyas. Aunque lópez ya hizo un intento de meterle mano a ese cajón, el propio Banco lo bateó ipsofacto.
Así que el dato de las reservas contra la necesidad de financiamiento no es argumento que venga al caso.
Es puro blof.
Pero recurrir a la mentira de que el crecimiento de la reservas del Banco de México es señal de que las finanzas públicas están sanas, sólo revela que no existe ningún argumento verdadero.
Es como decir que tus finanzas están sanas porque algún vecino tiene un buen ahorro.
Nada que ver.
Y en segundo lugar, la mentira central de ayer (cada día hay alguna o varias) afirmando que no se han contraído créditos, queda evidenciada con el reporte de la Deuda publicado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que usted o cualquier persona puede consultar fácilmente en el portal oficial, en la sección de Finanzas Públicas y Presupuesto.
En el cuadro relativo a la Deuda Externa del Sector Público Federal se puede leer:
Deuda Bruta a diciembre de 2019 : 204 mil 684.3 mdd.
Deuda Bruta a junio de 2020 219 mil 273 mdd.
En el lapso hubo una disposición de 31 mil 941.3 mdd y una amortización (pagos a la deuda) de 16 mil 960.7 mdd
El cuadro de «Endeudamiento neto» anota 14 mil 980 millones de dólares en los primeros 6 meses del año.
Y en el apartado relativo a la Deuda Interna:
Deuda Bruta a diciembre de 2019 : 7 billones 570 mil 648.4 millones de pesos
Deuda bruta a junio de 2020: 7 billones 804, 246 millones de pesos.
El saldo arroja un endeudamiento neto de 208 mil 872.5 millones de pesos.
Pero como ya sabemos todos los mexicanos, que lópez mienta en los temas de la deuda, de la economía, de la pandemia o de cualquier otro, no es noticia.
La pregunta, insisto, es dónde quedó esa lana.
Y no sólo esa, también la cantidad indefinida que por decreto publicado el 2 de abril le exprimió a equis cantidad de fideicomisos.
Y digo equis cantidad de fideicomisos porque no se ha informado cuántos fueron liquidados ni cuánto dinero se obtuvo de esas ordeñas.
Sólo sabemos que lópez ordenó que el dinero fuera enterado a la Tesorería de la Federación a más tardar el dia 15 de abril.
Fuentes extraoficiales de la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de Diputados me mencionaron ayer una cantidad de «alrededor de 250 mil millones de pesos».
Por su parte la diputada federal perredista Mónica Almeida López habla de 700 mil millones de pesos.
Pero lo cierto es que ni siquiera el Congreso cuenta con esa información.
Al justificar la instrucción de exprimir los fideicomisos lópez dijo que usaría el dinero «en progrmas sociales y en rehabilitar las refinerías» de Pemex.
Luego se habló de aplicar los recursos a enfrentar los efectos de la pandemia en la economía.
Otra cosa cierta es que a enfrentar «los efectos de la pandemia en la economía» se le ha invertido una cantidad mínima.
Ni de lejos se asemejan a los montos de deuda externa e interna adquiridos en el semestre, que son aproximadamente 560 mil millones de pesos a un tipo de cambio de 23 pesos por dólar.
Más de medio bnillón de pesos.
¿Dónde está el dinero?
Un dato revelado en su cuenta de twitter por el subsecretario de Hacienda Gabriel Yorio el 7 de Junio precisó que los créditos que ha recibido México son del tipo Development Policy Loan (DPL) es decir, un instrumento de financiamiento general que no va ligado a un programa o actividad específica.
El gobierno puede usar libremente el dinero en lo que desee, incluyendo el gasto corriente.
Lo que dejó muy claro el subsecretario es que no sería usado para temas de la pandemis.
También sabemos que dos créditos por mil 500 millones de dólares ( todos o una parte) están vinculados con apuntalar al Banco de Bienestar y construirle 3 mil 750 sucursales en dos años.
Pero además sabemos que para ese propósito sólo se han etiquetado 332 millones de pesos, entregados a la Secretaría de la Defensa Nacional en su calidad de contratista para construir las sucursales.
El diferencial debiera estar en la Tesorería de la Federación.
Esconder miles de millones de dólares y cientos de miles de millones de pesos ha sido una característica de los últimos meses del gobierno de lópez.
Nada facilita más la corrupción y los fines ocultos que los manejos en lo oscurito.
También en Culiacán ayer, lópez presumió:
“Si ustedes me dicen: ¿cuánto hay en caja?´, les puedo decir que 300 mil millones de pesos”.
Humano, humo y vano. ¿De que alardeas?, de lo que escaseas, dice el refrán.
¡Nada que presumir!
Trescientos mil millones de pesos no alcanzan siquiera para pagar un mes de gasto programable del sector público
En enero de 2020 ese gasto fue de 360 mil 51.2 millones de pesos y ya era 4.9 % menor que el del 2019
En junio de 2020 el gasto programable pagado fue de 334 mil 905 millones de pesos.
Tan sólo el gasto de Pemex es de 3 mil 700 millones de pesos diarios. Sí, diarios. Es decir mas de 670 mil millones en el semestre.
De manera que lo que tiene lópez «en caja» es más bien para llorar.
Nos revela que con todo y el cobro de impuestos que no sólo no cayeron en el semestre sino aumentaron ligeramente gracias a los cobros extraordinarios a los grandes corporativos deudores, y aun sumándole la deuda adquirida interna y externamente, mas lo exprimido a los fideicomisos… lo único que hay en caja no dura para un mes.
¿Dónde está el dinero?
¡Ya lo gastaron!
La deuda ha sido utilizada por el gobierno de lópez para sobrevivir.
Por supuesto, dejándole la carga a las nuevas generaciones,
Y ya no hay en caja para llegar al siguiente mes.
Pompa vana, y no comer mañana.
Además, lo único que queda es prestado.
Con 300 mil millones de pesos en caja las finanzas públicas están a punto de colapsar.
He ahí la respuesta.
Cuánta razón tenía Garganta Profunda, como se identificó en la historia de Watergate al informante secreto.
Opina