Para la construcción del Centro de Convenciones de Ciudad Juárez, hay mínimo una media docena de opciones, la peor de todas, indudablemente es el Parque Central Oriente, hay sectores que se oponen por ser un espacio público que si no ha sido debidamente utilizado, ha sido por la incuria de las autoridades estatales, que son las que tienen jurisdicción sobre el parque. La mejor de todas es indudablemente los hoyos de el Chamizal, aunque estos mismos grupos se opongan.
Pero si ya está tomada la decisión de una plebiscito da lo mismo, tienen capacidad de movilización y se hará lo que decida Morena, por eso es el alcalde quien lo anuncia y no la gobernadora; será una operación del morenismo. Si los hechos están prácticamente consumados, consideren con seriedad los hoyos, que permiten un crecimiento a futuro formidable. El éxito a favor de construir en el Parque Central está asegurado y hasta en un evento municipal pueden convocar a una consulta a mano alzada y ya. Si el éxito está asegurado háganlo en los hoyos, es el mejor lugar en toda la mancha urbana.
Un centro de convenciones en Ciudad Juárez, debe considerar en uno de los primeros lugares para su construcción, el potencial mercado de más de un millón de posibles visitantes de las vecinas ciudades de Las Cruces y El Paso; sobre la cercanía a los puentes internacionales tenemos un par de ejemplos: un porcentaje muy alto de los asistentes a los juegos de fútbol de Los Bravos, son habitantes de la vecina ciudad, quienes cruzan a pie por el puente de la Juárez y al terminar el juego es común ver numerosos grupos de aficionados regresando alegres y ruidosos a la vecina ciudad.
¿Alguien piensa que el hombre económicamente más poderoso del sur de los Estados Unidos y del norte de México, el paseño Paul Foster, es irreflexivo en sus decisiones?, que le da por las puntadas, como por ejemplo, construir un estadio de béisbol en pleno centro de la ciudad, con una gran cercanía con la frontera y para ello compró y derrumbó la presidencia municipal de la ciudad de El Paso, que le encantan los perritos chihuahua y por ello puso ese nombre a su equipo profesional de beisbol…no pasa por la cabeza que tanto la cercanía a la línea fronteriza, como el nombre responde a atraer al potencial mercado que supone una ciudad de, más de 1 millón 600 mil habitantes. Debemos pensar en que somos El Paso del Norte, una región conurbada de casi tres millones de habitantes.
El Centro de Convenciones de Chihuahua
Un antecedente importante sobre el potencial económico de un centro de convenciones nos lo ofrece la ciudad de Chihuahua, en el sexenio de Pancho Barrio en terrenos originalmente federales que fueron cedidos al estado, el gobierno de Francisco Barrio Terrazas, construyó la primera parte del complejo, que hoy es cuatro veces más grande porque se construyó en un espacio con posibilidades de expansión, como en Ciudad Juárez lo son los hoyos. Si así fuera el caso, en el Parque Central, se puede correr el riesgo de que corra el mismo destino que la otra mitad del parque en donde le han construido de manera amontonada el Museo La Rodadora, el Gimnasio de Bachilleres y otros arrimadijos, quitándole al parque por lo menos un 50 por ciento de su espacio.
Se gastaron en el sexenio de César Duarte al menos 100 millones de pesos sólo en la preparación de la tierra y y construyendo estacionamiento y dotando de luces el espacio en donde único que había era la primera piedra del muy cantando Centro de Convenciones, que fue anunciado hace por lo menos 20 años y para su realización existe un fideicomiso que requiere ser auditado, ya que los signos de malos manejos han sido denunciados múltiples veces y nada ha pasado porque lo manejan los empresarios de Ciudad Juárez, lo que los hace inmunes a a aplicación de la ley, monopolio que tienen los desposeídos, de los cuales están llenas las cárceles. Si no fuera así la mitad de los “pilares de la sociedad” que forman el fideicomiso estarían mínimo bajo arresto domiciliario, pues tienen para pagar el brazalete electrónico.
Más opciones
Los terrenos de lo que fue el Departamento Municipal de Tránsito son miles de metros cuadrados y tiene posibilidades de expansión hacia el poniente y al sur, ciertamente está en una zona con un entorno deprimido, pero puede ser como una piedra en el agua, detonaría los espacios que la rodean y muy cerca están los terrenos convertido en parque en donde desde época de Fernando Baeza Meléndez, se planeaba construir una macroplaza.
Son muchos los desatinos que en cuestión de urbanización y crecimiento se han dado en Juárez a ciencia y paciencia de los tres órdenes de gobierno. Claudia Sheinbaum en sus primero días como mandataria, dijo cuando se hablaba del nearshoring, que no quería otra Ciudad Juárez, ¡sabe de nuestra carencias y necesidades! Sabe que somos la ciudad más fea de México, sólo por arriba de Torreón, a quien hace poco le quitamos el primer lugar.
La principal obra del mejor alcalde que ha tenido Ciudad Juárez, Francisco Villarreal Torres: El Instituto Municipal de Investigación y Planeación (IMIP), a quien sólo el ex alcalde Ramón Galindo acató y como consecuencia dejó un Centro Histórico que llegó a ser un paseo nocturno, por el sólo disfrute de ver recuperada mejorada una de las zonas más queridas de la ciudad, nada menos el lugar de su nacimiento. Despertaba el orgullo de pertenencia ver iluminada la antigua Aduana la Casa del administrador, nuestra primer zona peatonal, las calle libres de postes de electricidad.
Lamentablemente el siguiente alcalde Gustavo Elizondo Aguilar, aguantó la obra pública por año y medio, hasta doblegar a sus intereses al director del IMIP Luis Felipe Siqueiros, quien no quiso salir de la nómina y de ahí pal’real, se degradó el IMIP y ahora de nada sirve.
Pero volviendo al Centro de Convenciones, no hay manera de que Morena no gane el plebiscito, tiene capacidad de movilización, aún cuando la función correspondería al gobierno estatal de extracción panista, la realpolitik nos dice que movilizando a los morenistas darán “legitimidad” a construir en el Parque Central Oriente el centro de convenciones es una apuesta segura y esa área del parque terminará siendo devorada por la multicitada obra.
Ahora bien hay de burradas a burradas, aún es tiempo de hacer y ganar un plebiscito para su construcción en los hoyos, incluso el daño al patrimonio municipal sería menor, sólo habría que convencer a la federación, con un buen proyecto ejecutivo se puede, ante lo inevitable, el mal menor.
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...
Relacionado