Se cumple el 118 aniversario del inicio de la Revolución Mexicana, el movimiento armado que buscaba ponerle fin a la dictadura del presidente Porfirio Díaz. A partir de este hecho la figura del general Díaz, considerado héroe nacional durante la Intervención Francesa, pasó a ser uno de los villanos favoritos de la historia del régimen priista, a vivir un período de redención a los ojos de muchos en los últimos años.
La biografía sobre el defenestrado presidente Porfirio Díaz, del doctor Paul Garner, catedrático en Cowdray, en el departamento de Estudios Hispánicos, Porfirio Díaz. Del héroe al dictador, una biografía política, es un importante intento de poner al presidente Díaz en su justa dimensión.
Escrita originalmente para la colección “Profiles in Power” de la Editorial Longman, en donde sólo dos mexicanos: Juárez y Díaz acompañan a figuras tales como: Gorbachov, Hitler, Isabel I, Castro y Mao entre otros. Dichos trabajos se centran en el ejercicio del poder de éstos, alejándose de un seguimiento cronológico de sus vidas, esas en donde algunas veces, la imaginación del biógrafo entra en acción, para cubrir algunos vacíos que la historiografía y los documentos no pueden.
Garner, en el caso de Díaz, se centra en su trayectoria política, para desentrañar el camino que llevó al Presidente de ser un héroe de la Segunda Intervención Francesa, ferviente defensor del liberalismo radical, y del anti reeleccinismo, a un dictador: quizá uno de los personajes de la historia nacional más vilipendiados y difamados; como Fernando Orozco Linares, en su biografía de 1991 reconoce: “No hay libro de historia, de civismo, de economía, etc., en los que sus autores no se den ‘vuelo’ en ultrajar la memoria del general Díaz, faltando gravemente a la verdad y a la justicia (…) miles y miles de estudiantes están en la absoluta seguridad de que Díaz es un tirano, asesino, traidor y ladrón”. (p.35)
Para esto, el autor hace un minucioso estudio de la historiografía y documentación relacionada con la historia de su biografiado; el cual mucho de ese trabajo, está dentro de la nueva corriente historiográfica revisionista.
Dividida en ocho capítulos, se cuenta su advenimiento al poder, desde sus inicios como seminarista primero, luego como estudiante de Derecho, en su natal Oaxaca. Hasta su exilio en París, luego de su renuncia en mayo de 1911.
Los capítulos son: 1) “Porfirio Díaz ante la historiografía mexicana”, 2) “Los fundamentos del México porfiriano: Liberalismo, autoritarismo y la lucha patriótica, 1855-1867”, 3) “El largo camino a la presidencia, 1867-1876”, 4) “Liberalismo pragmático, 1876-1884”, 5) “Consolidación del poder: liberalismo patriarcal, 1884-1911”, 6) “Diplomacia, política exterior y relaciones exteriores, 1876-1911”, 7) “Pagando el orden y el progreso: Desarrollo económico, 1876-1911”, y 8) “El precio del orden y el progreso: el desmoronamiento”.
El primer capítulo, analiza el tratamiento de la figura de Díaz en tres etapas: “porfirismo”, que corresponde a la etapa contemporánea al presidente, en donde existía el culto a la personalidad y se exaltaba al “héroe militar”, “el patriarca austero” y “constructor de la nación”, aunque reconoce que ya existía para principios del siglo XX una corriente crítica al régimen de Díaz. Luego está el “anti porfirsmo” que surgió luego del triunfo de la Revolución, obviamente crítica, pues es el movimiento que brotó para derrocar al viejo dictador; en este período, desde los años treinta, surge la figura de Díaz como cruel y sanguinario; que resalta los vicios del Porfiriato de principios del siglo pasado, sin analizar el régimen como un todo. Luego el “neo porfirismo” aquí el autor, encuentra un paralelismo entre el rescate y nuevo tratamiento a la figura del Presidente, con la entrada del neoliberalismo como modelo económico desde 1982, por coincidir éste con las características del Porfiriato: fuerte inversión extranjera, privatizaciones y desregulación gubernamental. En el capítulo dos, analiza la fortaleza del fenómeno del caudillismo en México y la creación de camarillas, en donde existía un constante cambio de lealtades al interior de ellas según los intereses personales y de grupo. Algo que afectó profundamente al liberalismo, que cada vez más, hacía uso de prácticas “antiliberales” para realización de sus fines “liberales”, todo esto fue el ambiente en que se fue forjando la trayectoria política de Díaz. El capítulo tres analiza cómo se transformó la relación de Díaz y Juárez: de aliados a enemigos políticos; el primero, cada vez más popular, ferviente opositor del segundo, cuando éste, dio visos de querer perpetuarse en el poder; algo que le ganó el descontento de un sector liberal. La oposición que Díaz representaba contra Juárez, hizo que se convirtiera en líder del ala “radical y progresista” al interior del partido Liberal, corriente, finalmente ganadora.
El capítulo cuatro se centra en el papel de Díaz en la presidencia, desde el difícil comienzo, por la situación del país, el que carecía “aún de las necesidades básicas para lograr la estabilidad política: fronteras claramente definidas o seguras, relaciones estables con los vecinos del hemisferio (…) o con Europa. La inestabilidad financiera y fiscal, acrecentada por el problema persistente del endeudamiento externo, seguía siendo un obstáculo importante para el desarrollo económico”. (p.87)
Según Garner, el Presidente no era lo todo poderoso que el dictador reclamaba ser, ni era lo totalitario que alegan sus críticos. Mantenerse en el poder fue el resultado de una constante negociación y renegociación. Algo siempre presente en el trabajo del autor es el resaltar el “pragmatismo” y el “patronazgo” como principios de la política porfirista, así como también el uso de la “deferencia” y la “adulación” en ambos sentidos, tanto, hacia el presidente como hacia sus interlocutores, era la manera de ganarse sus favores. Otra de las características durante el Porfiriato, fue el atento cumplimiento a la celebración de elecciones regulares, pero cuyo resultado no se “dejaba a la suerte”, éste estaba ya preestablecido, gracias al nombramiento directo de candidatos, lo que le permitía ir armando una red clientelar, pero también se daba el que las candidaturas tuvieran que ser negociadas. Lo que eventualmente le costó su permanencia en el poder.
Uno de los grandes logros de Díaz, fue la pacificación del país, conocida como pax pofiriana, lograda en base al uso de la fuerza. El abatimiento del bandidaje; y las formas para remediar el problema es uno de los hechos que más duramente le ha sido criticado. Al igual que el trato con la prensa, y su represión. Muchos de los críticos del presidente acabaron tras las rejas en más de una ocasión; pero según Cosío Villegas, el asesinato de periodistas, si bien, sí se dio; no fueron muchos los casos; y estos se dieron más que como parte de la política de Díaz; fueron más, un asunto de abuso policíaco.
Entre otros de los aspectos del régimen porfirista, está el mejoramiento de las relaciones con la iglesia, en los que se ponía de manifiesto el pragmatismo que caracterizó a Díaz, éste podía no instrumentar la ley a pie juntillas, mientras el clero no se involucrara en asuntos públicos.
Hacia el final del libro, se enumeran, los logros en materia económica, política y social. Entre los que se destaca el restablecimiento de relaciones con Europa y un fuerte acercamiento con Estados Unidos, en gran medida, gracias a la inversión extranjera (especialmente en ferrocarriles y minería), pero algo interesante es que según Garner, y contrario a lo que se pudiera creer; es que Porfirio Díaz, no fue del todo obsequioso con sus socios como se ha dado a entender en el discurso oficial.
Finalmente el autor reconoce como una de las causas de la caída de Díaz, la disparidad en el desarrollo regional. La “heterogeneidad” del país, dio pie a que diversos problemas surgieran en 1910, lo que finalmente le puso fin al gobierno de más de treinta años de Porfirio Díaz.
El trabajo de Garner, cubre todos los aspectos importantes en la trayectoria política de Díaz, que según el autor, jamás renunció a sus ideales liberales y con un genuino sentido de preocupación por la estabilidad y porvenir del país.
Es un relato, ágil y sin un lenguaje complicado; esto hace que la lectura sea fácil y de cómoda comprensión, y que a lo largo de poco más de 200 páginas, nos demos la dimensión exacta de las luces y las sombras de unos de los formadores del México moderno.
*Garner, Paul, Porfirio Díaz. Del héroe al dictador, una biografía política, Editorial Planeta, México, 2010.
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