A partir de este miércoles 17 de octubre de 2018, en Canadá está permitido cultivar, poseer y consumir mariguana con fines lúdicos, en un negocio multimillonario cuyo impacto mantiene al mundo a la expectativa.
Los productos derivados, como alimentos, cosméticos o cigarrillos electrónicos con la yerba no serán autorizados hasta 2019, a pesar de que los empresarios canadienses ya incursionan en estos nuevos mercados.
Desde la elección de Justin Trudeau en 2015, los mercados han estado nerviosos y miles de millones de dólares han ido a parar a productores canadienses de cannabis.
Las tres compañías más grandes del sector que cotizan en la Bolsa de Toronto ya acumulan más de 30 mil millones de dólares canadienses (23 mil millones de dólares estadunidenses) de valorización.
Se estima que la legalización impulsará la economía canadiense y generará de 816 millones a mil 100 millones de dólares en nuevos ingresos en el cuarto trimestre, sin contar al mercado negro, que se espera que continúe surtiendo a una cuarta parte de la mariguana que se fuma en Canadá, según el Instituto Canadiense de Estadísticas.
Esto se traduce, según las previsiones oficiales, en una ganancia de 400 millones en ingresos fiscales para el primer año, que se dividirá entre las provincias (50{1735f8c4d45cf8a7c22ecbf90211e3be8db77eaf7294ee842f16f03e71870070}), los municipios (25{1735f8c4d45cf8a7c22ecbf90211e3be8db77eaf7294ee842f16f03e71870070}) y el gobierno federal (25{1735f8c4d45cf8a7c22ecbf90211e3be8db77eaf7294ee842f16f03e71870070}).
En total, el Instituto Canadiense de Estadísticas calcula que 5.4 millones de canadienses comprarán mariguana en tiendas autorizadas en 2018, 15{1735f8c4d45cf8a7c22ecbf90211e3be8db77eaf7294ee842f16f03e71870070} de la población. Unos 4.9 millones de canadienses ya la consumen.
La experiencia canadiense será seguida de cerca por el mundo, dijo Trudeau en mayo. “Los aliados con los que he hablado están interesados en ver cómo esto va a ocurrir (…) antes de aventurarse”, señaló.
«Si funciona bien, y yo espero que funcione bien, me sorprendería si tardan mucho en considerar que el modelo podría funcionar para ellos”, agregó el dirigente liberal, que admitió haber fumado ya “cinco o seis veces” en su vida, algunas cuando era legislador.
La medida entra en vigor cinco años después de que esto fuera permitido en Uruguay, pionero en esta materia.
Opina