Para cualquier efecto de carácter político-electoral, la encargada por Morena para que el nuevo partido aplanadora tome el control del gobierno del estado en 2027 es la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel, quien por cierto tiene su dirección oficial en la ciudad de Chihuahua, o por lo menos eso dice su credencial de elector. Desde las elecciones de 2018, la responsable de la operación política en varios estados norteños es la mencionada secretaria, quien, tras un fuerte rumor sobre su salida de la Secretaría de Bienestar (SB), provocó una desbandada; varios de sus colaboradores en la entidad empezaron a buscar un nuevo equipo, y ahora viene el ajuste de cuentas.
Se va Saldaña Rodríguez
En el caso de Mario Saldaña Rodríguez, subdelegado del Bienestar en Nuevo Casas Grandes, es uno de los primeros cambios. El buen Mario viene arrastrando desde el año pasado una acusación de violencia de género interpuesta por la entonces síndica y ahora regidora de Morena, Venus Yadira Olmos Hernández. El asunto sigue sin solucionarse del todo, pero la actual regidora demandó judicialmente y las cosas le son favorables; la salida es prácticamente obligada.
También se va Mata Márquez
Aunque tiene mucho tiempo con un pie afuera de la delegación del Bienestar, el subdelegado para el estado de Chihuahua, Rafael Mata Márquez, dejará el puesto en los próximos cuatro segundos. El joven Mata tiene un pecado muy difícil de perdonar por Ariadna Montiel: una gran cercanía con el senador Juan Carlos Loera, y su suerte está echada; va para fuera y no hay otra posición para él. Otros cercanos a Juan Carlos, como Ulises García Soto, supieron con tiempo crear nuevas amistades con otras figuras que pudieran apadrinarlos. En el caso de este exdiputado, es de todos conocida su relación cercana con Mario Delgado, actual secretario de Educación Pública. Como operador, Mata es menos malito que Ulises, pero aquí no se está aplicando el criterio de capacidad, sino el del amiguismo.
Ariadna es parna de Andy
La secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel, ha resultado una operadora política muy bien ponderada por el hombre fuerte del partido Morena: Andy López Beltrán, quien le tiene gran estima y confianza, no obstante sus fracasos en Chihuahua en 2021, donde les ganó Maru Campos, y en Coyoacán en 2024, donde el panista Giovani Gutiérrez Aguilar logró la reelección en la alcaldía de esa zona del sur de la Ciudad de México. Pero bueno, en política se gana y se pierde, por lo menos hasta hoy, porque no veo lejano el día en que se popularice el dicho “gánale a Morena”. Por cierto, Ariadna impuso como coordinadora en el proceso de Coyoacán a Mayra Chávez, mientras que la poderosa chihuahuense Bertha Luján Uranga quería entretenerse en esa coordinación. De ahí pal’real, las relaciones Ariadna-Bertha son de golpeteo.
Ariadna es comprensiva
El fracaso, o la parte del fracaso que le corresponde a Mayra Chávez por la derrota de Morena en Coyoacán, no merma la confianza que Montiel tiene en la expriista, ya que la convirtió en la delegada estatal del Bienestar y la responsable de la operación política, que tiene como principal objetivo afiliaciones masivas y labrar el camino para el triunfo de morenistas en las elecciones para jueces. Morena va por todo, tal como lo ordenó la Voz de Macuspana, a través de su Heraldo, Andy.
¡Ah! También se va Brighite
Es cosa juzgada la salida de la dirigente estatal de Morena. No saldrá en los próximos cuatro segundos como Mata Márquez; Brighite Granados de la Rosa fácilmente aguanta diez minutos antes de dejar la dirigencia. Se va a tardar más porque hay formalidades que seguir, empezando por convocar a reunión de Consejo Estatal y cosas así. O sea, que mientras se convoca y se reúnen, y discuten y le dan matarile, sí pasan unos diez minutos.