La insistencia de lópez en que el país se regodeara con un video en el que aparecen dos políticos de medio pelo contando pacas de dinero está dejando a la fiscalía descarapelada y le trajo a lópez una sopa de su propio chocolate.
Por WhatsApp me llego un comentario que dice:
«Hace 17 años salió otro videoescándalo de sobornos y no pasó nada, al contrario, el jefe de los extorsionadores hoy es Presidente de México y las esposas de los captados en los videos una es jefa de gobierno y la otra vicepresidenta de la
Cámara de Diputados».
Unos cuanto dias antes habíamos tocado ese tema.
Obviamente, el comentario se refiere a los videoescándalos de cuando lópez era jefe de gobierno de la Ciudad de Mexico, entre 2000 y 2005, y sus colaboradores René Bejarano y Carlos Imáz fueron exhibidos recogiendo dinero de sobornos para lópez.
Y también obviamente se refiere a las esposas de ambos, Claudia Sheimbaum y Dolores Padierna, los cuatro del primer círculo de lópez.
Bejarano e Imaz desaparecieron de la escena política, pero no del sótano lopista, donde siguen operando, y sus esposas fueron y siguen siendo protegidas de lópez públicamente y desempeñan cargos de gran relevancia.
Imaz y Sheimbaum siguieron casados hasta 2016, cuando ella ya era delegada en Tlalpan, cargo que él había ocupado cuando fue sorprendido recibiendo aquel soborno videograbado.
Tienen más contenido aquellos que el solicitado por lópez a la fiscalía y que apareció unas horas después en redes «misteriosamente», porque los de 2003 muestran quién está entregando el dinero y el de esta semana no.
Como dirían Bejarano y Dolores Padierna en un meme: «Novatos».
Los videos de Imaz y Bejarano también han vuelto a ser virales en estos dias, por la inevitable semejanza y la inescapable oportunidad propagandística.
En aquella ocasión, Bejarano e Imaz sí estuvieron presos, como lo estuvo también el Secretario de Finanzas del Gobierno de lópez, Gustavo Ponce, quien fue captado en otro video jugando millonadas de dinero malhabido en Las Vegas.
Por supuesto, el más visto esta semana fue el promovido por lópez.
Lo anhelaba, lo pidió y lo obtuvo.
Sin embargo, dicho video nada representa en términos legales, ni siquiera en términos anecdóticos.
No exhibe quién entregó el dinero ni para qué, ni dónde ni cuando se captó.
Pero sirvió para que lópez contara una historia completa, afirmara qué destino tuvo el dinero y a manos de quién fue a parar, según su dicho.
Todo sin ningún sustento, más que su cuento.
Porque en realidad el video ni siquiera existe en los documentos del proceso.
Así ha conformado lópez su «prestigio» de luchador contra la corrupción, con falsedades, engaños y cuentos sin pruebas.
Tambien uso lópez la falsedad de que los videos de Lozoya son «asuntos penales de estado».
Descarada mentira.
Los asuntos penales de estado son aquellos que atentan contra la seguridad de las instituciones del Estado como Rebelión, Ataques a La Paz Publica, Sabotaje, Motín, Sedición etc.
Pero en ningún lugar de la ley aparecen como tales los delitos de corrupcion, peculado o uso de bienes de procedencia ilícita.
Lo que demostró lópez fehacientemente una vez más es que su único afán es propagandístico y manipulador.
Luego de contarnos toda la historia que inventó y que no muestra el video, concluyó:
“Este video es bastante fuerte, muestra la inmundicia del régimen de corrupción que imperaba, porque todo este dinero se utilizaba para comprar voluntades, conciencias, para comprar votos”.
Y se atrevió a decir que así lo ha declarado Lozoya.
Delictuosa aseveración, pues no hay ninguna razón legal para que conozca las declaraciones de Lozoya y si las conoce está confesando un delito cometido por él y por la fiscalía.
Y no es uno, son uno tras otro.
Ayer «se filtró» otra información que nutre la alegría de lópez.
Fue hecha para complacerlo.
Refiere que Lozoya presentó una denuncia ante la FGR contra los expresidentes Peña, Calderón y Salinas y los exfuncionarios Luis Videgaray, José Antonio González Anaya, José Antonio Meade Kuribreña y Carlos Treviño Medina.
Como estaba previsto, todo un festin para las mañaneras.
También menciona la supuesta denuncia a los ex legisladores Francisco Javier García Cabeza de Vaca, Francisco Domínguez, Salvador Vega, Jorge Luis Lavalle Mauri, David Penchyna Grub, Ernesto Cordero y Ricardo Anaya.
Riquísima materia prima para la relatoría de lópez, pero que aun siendo verdad requeriría de ser probada. Mientras tanto no pasa de ser una denuncia de un procesado dispuesto a decir lo que lópez quiera a cambio de tantos privilegios.
Sin embargo, la filtración evidentemente pone en riesgo el debido proceso.
Seguramente está hecho con toda la intención.
La FGR ya emitió un comunicado diciendo que investigará quien tuvo acceso indebidamente al expediente.
O sea, confirmando que lo filtrado efectivamente está en la denuncia.
Y no necesitan investigar quién la filtró, basta que le pregunten al fiscal quién le dió la orden a través de Julio Sherer Ibarra, Consejero Jurídico de la Presidencia.
Así opera esa asociación delictiva.
Y la defensa de Lozoya se desmarcó institucionalmente de la filtración, pero también confirmando la jugosa denuncia.
En un comunicado, el abogado Miguel Ontiveros Alonso manifestó que «de conformidad con la Constitución Política de México y en armonía con su ordenamiento jurídico, los asuntos del orden penal deben desahogarse ante las instituciones del Estado».
En su aparente desaprobación lleva solapada la confirmación de la denuncia y su contenido.
Así operan.
No se necesita tener bola de cristal para entender que lo que está sucediendo es un montaje que jurídicamente no llegará a nada más que a la impunidad para Lozoya.
Lo que seguramente sí le consta a lópez es el destino que tuvo el dinero que fueron a cobrar en su nombre sus coolaboradores Imaz y Bejarano en 2003.
Pero de eso no dijo una palabra de condena a la corrupción, ni ahora ni entonces.
Al contrario, con todo cinismo, en 2003 acusó que los videos de Bejarano e Imaz eran parte del «compló» de la mafia del poder.
Posiblemente haya sido Salinas quien entregó a los medios uno o varios de aquellos videos, pero el dinero de la corrupción no era para Salinas, era para lópez.
Viene pues el tiempo de la venganza de lópez contra Salinas.
Recientemente retomé en este espacio una entrevista de Bejarano declarandose «confiable» y «leal» porque no quiso delatar a lópez como el destinatrio del dinero corrupto de aquel video, aunque tácitamente lo reconoce.
http://www.omnia.com.mx/noticia/154260/la-venganza-de-lopez-contra-robles
Lo que ahora vemos en el affair lópez-Lozoya bien huele a compló de la nueva mafia, con un original estilo que se caracteriza por pisotear todo, fiscalía incluida, en el camino a las elecciones.
La fiscalía entendida como anexo de la oficina electoral de la presidencia.
Lo cierto es que tras el escándalo, puede usted apostar que el show no resultará en juicios a los «denunciados» por Lozoya, ni veremos a peces gordos tras las rejas.
Tendremos a los expresidentes para ser piñateados a placer en las mañaneras con el aullido del respetable, principalmente a Salinas en este nuevo capítulo.
Un fabuloso festín.
Veremos como se da el cambio de trapecio, de gobernar con discursos a gobernar con expedientes de la fiscalía.
Recordemos que es la primera ocasión que lópez hace campaña desde el gobierno.
Ya está redobló intensidad la campaña para 2021 y formalmente aún no comienza.
Las encuestas cotidianas muestran que la aceptación social del gobierno de lópez ha caído sustancialmente en los últimos meses y se ha recuperado de dos a tres puntos en las últimas semanas con la llegada de Lozoya al país.
Nada extraordinario.
Pero no sabemos que «otros datos» secretos tenga lópez derivados de las crisis sanitaria y económica, que lo estén llevando a montajes tan precipitados, sobre todo cuando las elecciones están aun a 10 meses de distancia.
A partir de hoy me tomaré unos dias. Regresaré al país el dia 28. A ver que encuentro. La columna reanudará su publicación el dia 30.
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