El número de muertos, debido a los incendios forestales al norte de California se ha elevado a 42, lo que lo convierte en el más letal en la historia del estado, reportaron las autoridades.
El incendio que se salió de control durante el fin de semana pasado es también el más destructivo que se haya visto en California. Ha dejado reducida a cenizas a la ciudad de Paradise de 26,000 habitantes. El fuego ha desplazado a más de 50,000 personas, y ha consumido un total de 7,177 edificios, en su mayoría casa habitación. El incendio también ha arrasado con 46,000 hectáreas de terreno.
El lunes por la noche, el presidente Donald Trump, declaró al estado como zona de desastre, por los incendios forestales que ardían en ambos extremos del estado. En un mensaje vía Twitter el presidente dijo que «quería responder rápidamente para aliviar algo del increíble sufrimiento», escribió el mandatario.
Por su parte el gobernador demócrata, Jerry Brown, que había solicitado la declaración, lo que haría que las víctimas fueran elegibles para recibir asesoramiento sobre crisis, ayuda para la reconstrucción de vivienda, un fondo de desempleo, y asistencia legal.
Se teme que el número de muertos pueda elevarse, pues más de 200 personas están en calidad de desaparecidos, por lo que más de una docena de médicos forenses y equipos de búsqueda y recuperación se han desplegado en el área de la ciudad de Paradise en búsqueda de más restos.
Familiares y amigos recorren este martes la zona evacuada, buscan en los albergues, o llaman a los servicios de emergencia, a los hospitales y a la policía, en búsqueda de sus seres queridos.
Opina