Regalo encubierto de 50,000 m²
La cesión en comodato de 50,000 m² municipales a Geoenviron México es un regalo envuelto en papel de “proyecto ecológico” que el Cabildo desempacó sin leer la letra pequeña. Mientras escuelas públicas reciben donación condicionada a uso educativo, una empresa privada se lleva siete veces más terreno sin pagar un centavo ni garantizar empleo local. La regidora Karen Michaeel Escalante Ramírez justifica la operación con retórica de “aprovechamiento integral”, pero omite el costo de oportunidad: ese predio podría albergar un parque industrial municipal, viviendas sociales o un centro de acopio público de llantas con ingresos para el erario. En vez de eso, el municipio entrega la cabezada y se queda con las riendas rotas.
Riesgo tóxico en el proyecto verde
Procesar llantas usadas en pleno desierto de Samalayuca implica trituradoras, hornos y posibles emisiones de compuestos orgánicos volátiles que viajan cientos de kilómetros. El dictamen no exhibe manifiesto de impacto ambiental, ni plan de monitoreo de aire, agua o suelo, ni póliza de seguro contra contingencias. La empresa promete “tecnología limpia”, pero el Cabildo acepta la palabra sin exigir pruebas piloto ni fianza ambiental. Si el proyecto falla o contamina, el pasivo recaerá en el municipio: remediación, demandas y pérdida de confianza ciudadana. El desierto no perdona errores; el Cabildo, en cambio, parece dispuesto a dormir la siesta mientras el polvo tóxico se levanta, sin duda a ciencia y paciencia del alcalde Cruz Pérez Cuéllar.
¿Favoritismo opaco?…o clarísimo
¿Por qué Geoenviron México y no otra empresa? El expediente no incluye licitación pública, comparación de ofertas ni evaluación técnica de alternativas. Recientemente la Iglesia Apostólica tuvo que acreditar “todos los requisitos” por 253 m²; la empresa recibe 197 veces más terreno con solo una presentación verbal. Ausencia de cronograma de inversión, metas cuantificables de reciclaje o cláusulas de reversión inmediata por incumplimiento. Esta asimetría huele a tráfico de influencias disfrazado de urgencia ambiental. El Cabildo votó a ciegas y ahora descansa la cabezada sobre la almohada de la discrecionalidad.
Se sienta un precedente fatal
Al avalar este comodato, el Ayuntamiento sienta un precedente letal: cualquier empresa con un PowerPoint verde puede solicitar decenas de miles de metros cuadrados gratis. Mañana será una minera, pasado una cementera, luego una procesadora de baterías de litio. Cada “proyecto integral” erosionará el patrimonio público hasta dejar al municipio sin terreno ni ingresos. Los 50,000 m² de Samalayuca no son un préstamo; son la primera mordida a un pastel que el Cabildo sirve con los ojos cerrados y la cabezada bien puesta.
Alza en predial: ¿ajuste inevitable?
Este miércoles, los regidores y regidoras de Ciudad Juárez, junto al alcalde Cruz Pérez Cuéllar, aprobarán sin chistar los ajustes a las Tablas de Valores Unitarios de Suelo y Construcción para 2026, sumando más cargas a la ya temida cuesta de enero federal. Un aumento disfrazado de «necesario» que nadie cuestiona, porque en el cabildo morenista la obediencia es ley y la crítica, un lujo prohibido.
El bolsillo de la élite intocado
El alcalde presume que el Impuesto Predial subirá apenas un 4.2% o 5.2%, por debajo de la inflación, pero para quien vive en Los Nogales –tras ser expulsado de El Campestre por sospechas de corrupción– eso es calderilla. Esos centavos extras financiarán sus campañas por la gubernatura en 2027, regalando recursos juarenses a aliados en otros municipios, mientras el ciudadano común aprieta el cinturón.
¿Quienes pagan los anhelos de Pérez Cuéllar?
La propuesta de Tesorería, bendecida sin un solo pero por la Comisión de Hacienda, exonera mágicamente a zonas industriales y plazas comerciales «porque ya están al valor de mercado». ¿Casualidad? Habría que investigar dueños y nexos políticos. En cambio, castiga con actualizaciones a 19 fraccionamientos de clase media como Condominio Conifer, Puerta de Hierro II o Gran Patio Zaragoza, priorizando intereses ocultos sobre equidad.
Esos votos no se tocan
Los sectores populares, base electoral de Morena –Los Kilómetros, Felipe Ángeles, Puerto de Anapra y más–, quedan intocados para no perder votos. El aumento recae en la mayoría, justo cuando el gasto electoral del alcalde explota por su ambición gubernamental. Si recortaran propaganda y derroche en comunicación, ni un peso extra sería necesario. Así de hipócrita y fácil.
Centralismo presupuestal asfixiante
La diputada Carmen Rocío González Alonso, presidenta de la Comisión de Federalismo y del PAN, denunció que el Proyecto de Presupuesto 2026 consolida un gasto federalizado cada vez más centralista, reduciendo drásticamente recursos para estados y municipios. Año con año, el porcentaje destinado a entidades locales disminuye mientras el Gobierno Federal acapara la mayor parte, asfixiando haciendas locales y vulnerando su capacidad para atender necesidades urgentes de la población.
El mayoriteo de Morena
Pese a un acuerdo previo para remitir observaciones neutrales a la Comisión de Presupuesto sin aprobar ni rechazar, Morena, PT y PVEM la avalaron en sentido positivo, ignorando el pacto. González Alonso votó en contra, denunciando que esta imposición anula la pluralidad, obliga a la oposición a respaldar un documento lesivo y finge consenso donde solo hay autoritarismo disfrazado de unidad.
Federalismo, asignatura pendiente
El federalismo, como principio de equilibrio y autonomía, queda sepultado bajo recortes que limitan fondos legalmente correspondientes a municipios. La traición al acuerdo y la aprobación forzada no son errores, sino estrategia para silenciar críticas y consolidar un centro voraz que devora recursos mientras periferias agonizan, certificando la muerte institucional de un México verdaderamente federal.
